Descripción
Ni el maestro ni nadie supieron nunca de dónde provenían, pero al instante se dio cuenta de que contenían el brandy más exquisito que había probado jamás. Lo llamó Carlos I porque en su sabor percibió el destino de un gran conquistador.
Nota de cata:
- A la vista: Carlos I tiene un bellísimo ámbar profundo, salpicado por atrevidos toques dorados.
- A la nariz: Intensamente aromático y elegante con deliciosos sabores de vainilla y cacao.
- A la boca: En boca es persistente, equilibrado y complejo.